cactus
2014 

Hay un cuerpo solo, mordido. El viento lo alcanza, la lluvia lo empapa. La tierra está llena de lugares con vida, de ciudades de gente y de cajones de ideas. Mi cuerpo está solo, vacío.

Desde que supimos que la sequía mata no ha pasado un día en el que no sueñe convertirme en savia y reservar el agua para cuando alguien me haga su espejismo. Parte de un silencio enorme que encontró su fuego para emanciparse de las cosas serias se mantiene vivo hambriento de salir, para enajenarse del dolor posible que no tiene nombre es urgente ser. Esperar con ansias para florecer en alguna noche en algún lugar, en silencio fijo y solo respirar.

texto: salvador garcía.
neptunia
2015

El follaje resguarda la frágil y mutante estructura de las plantas, dejando pasar la luz necesaria para nutrirlas. Límite fluctuante, final abierto: las hojas ocultan, se enriendan, pero no dejan de ser permeables.

¿Cuántos follajes distintos existen? ¿Cómo se adaptan a los distintos escenarios?¿Cuánta luz dejan pasar, cuánta sobra resguardan? Encontré en la espesura del bosque una manera de preguntarme cómo será la estructura que esta mutando en mí, disparar hacia afuera para observar hacia dentro.

Atravesar el camino de lo incierto, ya no el instante sino el proceso, cámara en mano. A veces, quiero volver a ser como antes de Neptunia, desaprender el camino. Pero ahí está esa luz que nace de las sombras, recordándome que el pasaje era sólo de ida.